La División Mayor del Fútbol Profesional Colombiano (Dimayor) impuso sanciones severas a Atlético Nacional y Junior de Barranquilla tras los disturbios violentos del 26 de septiembre en el estadio Atanasio Girardot.
Origen de los disturbios
La situación estalló cuando Marino Hinestroza celebró su segundo gol simulando una aleta de tiburón con sus manos y limpiándose con la bandera de Atlético Nacional. Esta provocativa acción desencadenó un enfrentamiento violento en la tribuna occidental.
Caos en el estadio
Los hinchas de ambos equipos comenzaron a pelear, usando armas corto punzantes y causando caos en el estadio. A pesar de los esfuerzos de la policía y el personal de seguridad, los disturbios se extendieron rápidamente.
Sugerencias: Arquero argentino acepta sanción
Sanciones impuestas
Como resultado de estos incidentes, Atlético Nacional no solo perdió el partido por un marcador de 0-3 a favor de Junior, sino que también enfrentará una suspensión de seis fechas en su estadio, lo que significa que jugará sin público. Además, la Dimayor multó al club con 26 millones de pesos colombianos y 14.300.000 pesos por varias infracciones al Código Disciplinario Único (CDU).
Reacciones y apelaciones
La decisión de la Dimayor generó una fuerte reacción en redes sociales, donde los aficionados de ambos clubes manifestaron su descontento. Las reacciones de los hinchas en redes sociales subrayan la polarización de las emociones en el fútbol, donde la pasión a veces se convierte en violencia.
