La Sala Especial de Primera Instancia finalmente condenó a Taylor Ivaldi Londoño Herrera, exmagistrado del Tribunal Superior de Cartagena, por el delito de prevaricato por acción. Sin embargo, el tribunal también decretó la preclusión del delito de prevaricato por omisión debido a la prescripción, y además lo absolvió del cargo de falsedad ideológica en documento público, lo que ha generado reacciones mixtas en el ámbito judicial y político.
Decisión judicial sobre medidas de captura en 2015
Esta condena específicamente está relacionada con la decisión tomada el 7 de octubre de 2015, cuando Londoño Herrera ordenó cancelar las medidas de captura contra Alexander Moreno Carvajal. A pesar de que se emitió el fallo condenatorio, el tribunal permitió que el exmagistrado continúe en libertad mientras se emite la sentencia completa y se evalúa si es necesaria su captura, lo que ha generado críticas sobre la aplicación de la justicia en casos de corrupción.
Peticiones de la Fiscalía y Procuraduría en el caso de Londoño
Durante la audiencia, la Fiscalía solicitó una pena de entre 48 y 72 meses de prisión para el exmagistrado, además de una multa que oscila entre 66 y 124 salarios mínimos mensuales. Asimismo, pidió una inhabilidad para ejercer funciones públicas de entre 80 y 96 meses. Debido a que el condenado presenta problemas de salud, la Fiscalía sugirió que se le conceda prisión domiciliaria, lo que ha abierto el debate sobre la proporcionalidad de las penas en estos casos.
Por su parte, la Procuraduría respaldó las solicitudes de la Fiscalía y destacó que, dado el historial de Londoño Herrera como abogado y magistrado, la pena debe ser proporcional a la gravedad del delito cometido. Además, coincidió en que la prisión domiciliaria es una opción viable, aunque la decisión final recaerá en el juez encargado de este caso.
