Cecilia López es una mujer con una larga experiencia en la política. Ha participado como ministra o directora de entidades del más alto nivel en más de seis gobiernos, incluido el actual. Pero en ninguno de los anteriores gobiernos en los que participó, le había tocado soportar las críticas de su antiguo jefe, como le ha tocado recibirlas esta vez de Gustavo Petro.
En entrevista con Colprensa la exministra habló sobre los ataques de Petro contra sus excompañeros de gabinete, de cómo ve las cosas en el actual Gobierno, de sus preocupaciones para el tiempo que le falta a esta administración y dice que nunca volvería a trabajar con el Petro de hoy.
Aunque valora el rol que el actual mandatario ha cumplido en la política del país y lo que ha significado para la izquierda, dice que “no se preparó con un equipo”, y producto de eso ahora no tiene quién le hable y le diga en lo que se está equivocando. Además, es incoherente y todos le tienen miedo por su actitud agresiva y el “show” en el que ha convertido los consejos de ministros, en donde reparte regaños a todos sus ministros.
En el último consejo de Ministros, el presidente Gustavo Petro calificó de un “error inmenso” su entrada al gobierno. ¿Cómo toma estas afirmaciones?
Las tomo con sorpresa porque la verdad es que han pasado dos años. No entiendo por qué el presidente en cada uno de los consejos de ministros me menciona. Me sorprende por qué no ha podido borrar nuestros nombres y más me sorprende que habla de que su Gobierno es un éxito, el desempleo baja, la economía está creciendo, entonces por qué habla del fracaso y nos atribuye a nosotros el fracaso.
Tras lo sucedido, considera que fue un error haber entrado a este gobierno?
No porque yo entré cuando era otro gobierno, este presidente de hoy, su gobierno, sus consejos de ministros, no los reconozco, no tienen nada que ver con lo que yo viví. Yo definitivamente con este gobierno como está ahora jamás hubiera podido trabajar, pero esos no fueron los ocho meses que me tocó.
Usted dice que este es otro gobierno. ¿Por qué lo dice, en qué punto cambio todo?
Yo no sé la verdad, pero el día que yo me di cuenta fue cuando empezó el tema de la salud, cuando empezamos a responder una petición del presidente José Antonio (Ocampo), Alejandro (Gaviria) y yo.
Después de que nos llama, nos pone a trabajar como locos, hacía reuniones fuera de los consejos de ministros y aprobaba lo que nosotros decíamos; luego se nos venia en contra y se nos armó una situación muy difícil. Creíamos que era solo el tema de salud, pero las cosas eran muy complicadas.
Ya han pasado dos años de su salida del gobierno. ¿Por qué cree que después de tanto tiempo el presidente aun la menciona?
El presidente no es consciente de algo que está haciendo y es muy negativo. Si fuera el éxito que dice que es y que el Banco de la República le está frenando. ¿Para qué tiene que hablar del fracaso? Me parece que es contradictorio que al final termina reconociendo que ha fracasado lo que prometió y nos echa la culpa para salvarse y a los ministros que siguieron.
Somos unos genios porque en ocho meses hicimos un daño que dos años después más de 40 ministros no han podido reparar. Es absurdo esa posición, hay una incoherencia evidente.
En su carrera política ha pasado por varios gobiernos, como el de Samper, Gaviria y ahora el de Petro. ¿Este gobierno es tan diferente al resto?
Yo he pasado por seis gobiernos, incluyendo este y no es lo mismo, sobre todo en términos del presidente. En los ocho meses que estuve tenía un trabajo tradicional, pero sí es muy distinto lo que pasa ahora, donde los consejos de ministros son públicos, menos solemnidad, un presidente agresivo, vaciando públicamente a sus ministros, insultando y dejándolos muy mal.
Hoy en día no son consejos de ministros sino un show del presidente y eso yo nunca lo había visto, jamás en los ocho meses pasó.
El presidente está teniendo una actitud de echar culpas y enfrentarse a las Altas Cortes, ahora al Banco de la República. ¿Qué tan nocivo es esto para el país?
Esto se trata de la democracia. Me parece que el presidente en vez de estar gobernando está peleando y cuando uno ve eso pues uno se preocupa. Ojalá alguien le hablara al presidente, pero no tiene quién le hable, quién le diga algo en privado como lo hemos hecho todos los que hemos estado en distintos gobiernos. Todos tenemos sesiones privadas, él nos regaña y otras veces uno le dice que no está de acuerdo; pero nunca habíamos visto un presidente que no tiene quién le hable y que él escuche, solo tiene subalternos.
No tiene a nadie que le hable, todos le tienen miedo. El presidente no tiene quién le haga caer en cuenta de lo que se está equivocando y el que paga el pato es el país.
¿Cómo ve la actual situación económica del país?
Ahora el problema es la llegada de este ministro que no tiene las calificaciones que debe tener un ministro de hacienda, no tiene la formación.
Hasta ahora se había logrado un manejo relativamente serio de la economía, estamos en un periodo de muy bajo crecimiento, el desempleo así este bajando estamos de dos dígitos, la inflación no está bajando y la tasa de crecimiento es muy inferior a la que necesitamos realmente. Hasta ahora había cierta tranquilidad de que no había desorden, el problema va de aquí para adelante.
Además, me preocupa porque no tenemos director de planeación y si llega Susana Muhamad no tiene trayectoria en temas económicos, es muy peligroso. No hay ministro de Comercio en propiedad. Esto es muy preocupante.
Este gobierno también se ha caracterizado por estar en constante cambio de ministros, muchos duran menos de un año. ¿Qué tan peligroso es esta inestabilidad para el cumplimiento del mandato?
Eso es una tragedia, si el presidente cambia permanentemente es porque se está equivocando en los nombramientos. En segundo lugar, cada vez que cambia un ministro, cambia toda la administración, cambian los viceministros, los directores, tiene que aprender.
Lo peor es que él, un hombre que toda la vida quiso ser presidente no preparó un equipo. La gente del Pacto, que pueden ser muy brillantes como activistas, no tienen ni idea del estado. Eso es un mal síntoma y en eso el presidente es responsable, tiene que reconocer que si los cambia es porque no está nombrando la gente adecuada.
En el último mes se está hablando de una consulta popular para salvar las reformas sociales ¿Qué piensa de esta idea?
Yo lo veo con cosas positivas y negativas, si el Senado la rechaza él sacara su argumento que le gusta, que lo están persiguiendo.
Además, gastarse $700 mil millones o más. Está paralizando la actividad del gobierno para hacer campaña. Gastarse esa cantidad cuando no hay dinero para la salud, no hay dinero para los medicamentos, no hay para el Icetex.
Me parece un contrasentido, es muy grave porque los ministros están viajando para la consulta en medio de déficit muy serios en los cuales la responsabilidad final la tiene el gobierno, como en la salud, los medicamentos para que la gente no se muera.
De Nación Costeña.