Por: Nación Costeña – con apoyo de la Unidad Investigativa del Sistema Informativo de Nación Colombia
Mientras miles de costeños viven a punta de velas, con facturas impagables, cortes de luz a diario y promesas que no llegan, el ministro de Minas y Energía, Edwin Palma, se da el lujo de reunirse en Bogotá con un exgobernador inhabilitado por presuntos actos de corrupción. ¿El tema? Supuestamente, contratos por más de 126 mil millones de pesos.
Así como lo lee. El sistema informativo del que hace parte Nación Costeña accedió a fotos exclusivas de una reunión realizada esta semana. En ella participaron el ministro Palma, el actual gobernador del Vichada, Fulberto Guevara, y el exmandatario Sergio Andrés Espinosa Flórez, quien fue sancionado por la Procuraduría General con 12 años de inhabilidad por irregularidades en un contrato público de más de 23 mil millones de pesos.
Las imágenes muestran a Espinosa sentado junto al ministro, revisando documentos y tomando notas, en lo que presuntamente fue una reunión técnica para gestionar proyectos y, con ellos, plata. Según fuentes cercanas al encuentro, el sancionado actuaría como «filtro» entre contratistas, la Gobernación y el Gobierno Nacional, a pesar de estar impedido legalmente.
Y mientras eso pasa, ¿dónde está la energía para los costeños? ¿Dónde están los 500 mil millones que se prometieron para solucionar la crisis de CaribeSol y Air-e? ¿Dónde está la inversión urgente que se necesita en La Guajira, Sucre, Magdalena y Bolívar, donde la gente sufre a diario por la falta de energía?
Desde esta redacción nos preguntamos: ¿cómo es posible que un ministro que no da soluciones reales a los apagones de la Costa sí tenga tiempo para reunirse con políticos sancionados? ¿Dónde están los principios del «gobierno del cambio»? ¿Dónde está el respeto por las regiones que sí necesitan ayuda urgente?
Esta situación no solo indigna: huele mal. Porque cuando se mezclan inhabilitados, reuniones cerradas y contratos por cifras tan altas, los fantasmas de la corrupción vuelven a rondar. Y Palma, en vez de enfrentarlos, parece que les abre la puerta.
La unidad investigativa de Nación Colombia consultó al Ministerio, al ministro Palma y al exgobernador Espinosa, que manifestó: «Esas inquietudes que usted manifiesta no son ciertas». Por parte del MinMinas, silencio total. Ni una palabra. Pero las fotos hablan solas.
La Costa está cansada de los discursos. Exige acciones. No más promesas mientras se apagan los ventiladores. No más cinismo mientras los corruptos presuntamente se siguen metiendo por la puerta de atrás.
Desde Nación Costeña seguiremos investigando. Porque aquí también sabemos que la corrupción se combate con verdad y sin miedo, y que el pueblo tiene derecho a saber por qué el ministro se sienta con los sancionados mientras nosotros nos fundimos en la oscuridad.
