Chris Gardner, autor del best seller En Busca de la Felicidad, participó en la edición número 15 del Congreso de Acceso a Servicios Financieros y Medios de Pago (CAMP), organizado por Asobancaria. Su intervención llevó la discusión hacia un tema clave: el impacto del sector financiero en la felicidad de los colombianos.
El rol de la inclusión financiera en la calidad de vida
Durante la apertura del evento, el presidente de Asobancaria, Jonathan Malagón, resaltó que herramientas como la inteligencia artificial, los datos abiertos, los pagos inmediatos y el acceso al crédito buscan un mismo propósito: mejorar la calidad de vida de los ciudadanos.
Malagón comparó a Colombia con las cinco naciones más felices del mundo—Finlandia, Holanda, Islandia, Dinamarca y Suecia—, donde la inclusión financiera alcanza el 98% y el acceso al crédito llega al 65%. Según el líder gremial, este nivel de bancarización permite a las personas anticipar su consumo, financiar proyectos y mitigar riesgos económicos.
Colombia avanza en inclusión financiera, pero persisten desafíos
Actualmente, el 95% de los adultos en Colombia posee al menos un producto financiero, una cifra que lo ubica apenas tres puntos por debajo del promedio de los países más felices. Sin embargo, el acceso al crédito formal se sitúa en un 51%, lo que deja una brecha de 14 puntos porcentuales frente a las naciones líderes en bienestar financiero.
Malagón enfatizó que el país debe incrementar la inclusión crediticia del 51% al 75% para 2030. «Si lo logramos, ese momento se llamará felicidad», afirmó.
Reducir el uso del efectivo, una meta a 2030
El efectivo sigue dominando los pagos en Colombia, con un 79% de preferencia entre los ciudadanos. Asobancaria busca reducir esa cifra al 55% en los próximos seis años, promoviendo el uso de herramientas digitales para facilitar transacciones seguras y eficientes.
