El expresidente César Gaviria acusó esta noche al Gobierno de Gustavo Petro de proponer una reforma tributaria para «financiar pretensiones burocráticas y clientelistas de cara a las próximas elecciones», al sostener que el Congreso no puede permitir que se le meta la mano al bolsillo a los colombianos».
Para Gaviria, se trata de una de las reformas tributarias más ambiciosas y agresivas de la historia, al afirmar que «es un golpe directo a los pobres, la clase media y al aparato productivo del país».
«En lugar de plantear un recorte del gasto, que sería lo responsable dada la gravedad de la situación fiscal, el Gobierno insiste en ahogar con más impuestos a los trabajadores y a las empresas, con el único propósito de financiar pretensiones burocráticas y clientelistas de cara a las próximas elecciones», aseguró el exmandatario, actual director del Partido Liberal.
Sugerencias: “Los pobres no consumen gasolina”: Petro genera controversia antes de viajar a Japón
En su diatriba contra la reforma, radicada en la víspera por el ministro de Hacienda, Germán Ávila, en el Congreso y con la que se espera recaudar $26,3 billones, Gaviria señaló que el proyecto de ley plantea una ampliación del IVA a varios sectores y bienes, entre ellos los combustibles y las cuotas de administración.
Para el exmandatario, la propuesta es regresiva y no contempla el impacto en la inflación. A cambio de «dinamizar la economía», lo que se pretende es sacarle la plata de los bolsillos de los hogares para alimentar un presupuesto abultado, con muy pocas probabilidades de ejecución».
También criticó la creación o ampliación de gravámenes para sectores como el minero-energético y el financiero, al que se le «propone una ilógica tarifa del 50%», lo que, según anticipó, elevaría los costos de los bancos.
«El Congreso de la República no puede premiar a un gobierno que derrocha recursos y que ha abandonado la regla fiscal con una reforma que atenta contra el crecimiento, el empleo y el bolsillo de los más pobres. Los partidos políticos debemos exigirle al Ejecutivo responsabilidad: que retire esta iniciativa y proponga en su lugar un presupuesto austero, bien ejecutado y libre de corrupción», afirmó Gaviria.