La reacción de las autoridades en Cartagena evitó que un grupo de turistas pagara más de 6,5 millones de pesos (unos 2.742 dólares) por consumir tres comidas, una hookah, dos cocteles y el alquiler de un parlante en una playa de la ciudad.
El incidente ocurrió cuando los visitantes intentaron pagar con tarjeta y esta fue bloqueada por el monto inusualmente alto que el datáfono intentaba cargar: cerca de 12 millones de pesos. Ante el rechazo del pago, los vendedores implicados siguieron a los turistas hasta su hotel para insistir en el cobro.
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La situación fue reportada en tiempo real mediante la plataforma Titán Chat, una herramienta de atención inmediata impulsada por la Alcaldía de Cartagena. Gracias a este canal, la Policía de Turismo y Distriseguridad acudieron de inmediato al lugar.
Los agentes lograron mediar entre las partes y establecer un cobro justo, correspondiente al consumo real. La intervención evitó una estafa y protegió a los visitantes, quienes finalmente no fueron obligados a pagar el monto abusivo.
